TOTÓ

Vengo a cenar con mis amigas a la nueva apertura de moda en la Capital. Totó es el nuevo proyecto de Rafa Nadal y, es bastante parecido a Tatel en cuanto a local, colores, concepto. Pero Tatel me llamó más la atención por su personal; la inmensidad de todo y la cantidad de gente trabajando allí. Toto tiene una terraza en la entrada, pequeña, pocas mesas. Al entrar dispone de una zona acristalada con muchísima luz y hacia el fondo el local se oscurece y se convierte en un lugar íntimo y elegante. También en la parte delantera a la derecha hay un “reservado” muy bonito con una mesa muy larga, como para 12-14 personas. Nosotras estuvimos en una mesa redonda en esa zona junto al reservado. Es muy cómodo que hay muchísimas mesas redondas de todos los tamaños. En cuanto al personal todavía está un poco falto de rodaje. La mesa preciosa con todo tipo de detalles, incluida la vajilla grabada con el nombre y la servilleta enorme de hilo. Todo en Totó es ¡muy lujoso!. Las cocinas son impresionantes (siempre me gusta acercarme), están abiertas al público y hay algunos puestos en una pequeña barra anexa a la cocina para sentarse frente a los chefs y cerca de ese maravilloso horno de donde salen todas las masas. En primer término tienen preparadas todas las cestas de panes listas para traer a las mesas ¡muy original! Y forma parte de la decoración del local. Tienen música en directo que se escucha por todo el local, da igual la zona donde esté tu mesa. Para mi gusto la música estaba demasiado alta. El tipo de cocina es italiano, cuanta con una carta no demasiado amplia que incluye pastas y pizzas (lo digo porque últimamente hay italianos que o tienen una cosa o la otra), además de clásicos “antipasti” como el vitello tonnato, la melanzane, la croqueta de arroz, etc. y se completa la oferta con 8 pizzas, 10 pastas y escasos platos principales; no hay ningún plato de carne como tal ni de pescado (este no es el sitio). De aperitivo traen la cesta de panes variados que es una maravilla, incluye focaccia, picos, pan de queso, etc. Pedimos unos entrantes a compartir: Parmigiana di melanzane (18€) que estaba deliciosa, es el clásico milhojas de berenjena italiano, pero este estaba ¡Brutal!; Caprese di burrata (16€) ensalada de burrata, tomatitos y albahaca, estaba muy rica, la burrata es de gran calidad, estaba muy sabroso todo. También de entrante pedimos el Carpaccio de manzo (19€) es un carpaccio de ternera con parmesano, pero este plato le falta sabor a la carne, apenas se aprecia su existencia. Pinsa (llaman así a las pizzas) de Mortadela (19€); la preparan con strachiatella un poco de miel y está ¡estratosférica!; pedimos otra Pinsa al pomodoro, mozarella e acciughe (19€) es con anchoas y también ¡magnífica!; las masas las hacen y las hornean muy bien; todas las pizzas cuestan 18-19€ excepto la totó que vale ¡¡¡¡25€!!!! ¿será por la mortadela trufada?, exageración me parece. No pedimos ninguna pasta, tendré que volver a probarlas. De postre un Strudel (9€) postre de manzana en una especie de crêpe enrollada, bastante flojo y un Tiramisú (8€) en vaso muy espumoso y rico. En resumen: me sorprendió su cocina porque esperaba que fuera menos top, más de postureo. El local muy grande (no tanto como Tatel) precioso, decorado en negros y blancos. Los precios son bastante elevados sobre todo en la carta de vinos; pedimos 3 copas de vino que costaron entre 6 y 7 eur. La referencia más barata es una botella de 26€ y la más cara 1010€ un vino del Piemonte. Comparte aparcacoches con Tatel y, si no, tienes el parking del ABC de Serrano al lado. Castellana, 38.

7/10  https://www.totorestaurants.com/    -IG-   VIDEO