19. abr., 2021

RUTA 20

Tenía apuntado este sitio recomendado por alguien que no recuerdo, pero no me pareció nada como para echar cohetes. Una pena porque el concepto para una comida informal en terraza a base de pichos, tostas y raciones es bueno, pero comí muy regular. Además el camarero era muy antipático y además tuve un problema con 2 chicas que se pusieron a fumar en la mesa de al lado en la terraza, cuando está prohibido por el Covid. Todas estas circunstancias hacen que no ayude a que la experiencia culinaria sea óptima. Para comer pedimos: Risotto de boletus (14,90€) que viene en una cazuelita de buena cantidad que estaba pasable; Crêpe de pato pekin (4,60€) con su salsa de ostra, estaba bueno el pato pero la crêpe ligeramente tiesa; Tosta sardina ahumada con salmorejo (4,50€) que estaba rica, aunque no es algo que tenga ningún misterio; Tosta de jamón ibérico y salmorejo (4€) estaba muy buena porque el jamón era de buena calidad pero tampoco conlleva ninguna elaboración complicada; Langostinos crujientes  con mayonesa de sésamo (3,90€/2un.) que no me gustaron, los langostinos estaban blandengues, no crujientes, y no funciona nada bien con esa mayonesa que no nos gustó. Además de las salsas que acompañan a cada plato, se empeñan en bañar tu plato con el vinagre de Módena, manía que afortunadamente ya ha desaparecido de casi todas partes. De postre pedimos una Tarta Tatin (5,60€) que era muy muy floja. Gral. Alvárez de Castro, 20.

5.5/10   €/€€€€  https://restaurante-ruta20.es/   -IG-